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¡Cierra los ojos y vuela!
Con la publicación del texto de Laura Fernández González, primer premio David Varela 2014, ponemos un broche de oro a una edición de muy alto nivel. Una sorprendente narradora cuyas palabras logran adentrarnos en el vivir de una abuela verdadero paradigma de tantas vidas turonesas. Un estilo eficiente que, en cuatro folios, esboza con maestría el retablo de una larga historia común.
31 propuestas para Turón
Como culminación al ciclo de encuentros con las fuerzas políticas, CESVAT organizó el lunes, 4 de mayo, en el Ateneo de Turón, un acto público en el que analizó e hizo un balance de las propuestas para nuestro Valle. Para recordatorio, estos son los adelantos de los programas de los tres partidos, hasta ahora mayoritarios de nuestro Municipio.
2017 - Octubre a Diciembre
Ultimo trimestre de 2017 con protagonismos variados y algunos movimientos esperados desde hace tiempo. Carmen Gómez, hermana de nuestro amigo y colaborador incansable de la página José Luis Gómez, dando ejemplo de generosidad familiar cede al Ayuntamiento más de 300 piezas de la valiosísima colección de lámparas de mina apasionadamente acumuladas por él. Final de los necesarios trabajos para los aseos del emblemático vestigio minero de Pozu Espinos gracias al plan Leader y comienzo del inesperado centro de salud en el colegio La Salle. Hunosa condenada a pagar 420.000 por la quiebra de la farmacéutica Diasa de la Cuadriella, proyecto pesadilla de nuestra economía local. Vuelve también lo que podríamos llamar el Figaredo Silicon Valley, utopía irresponsable o timo electoral que va y viene al ritmo de la imaginación de nuestros gobernantes. Afortunadamente la recién elegida presidenta de Mejoras del Valle, Silvia Suarez, recuerda a los ediles las prioridades específicas y muy reales de las necesidades del Valle. Fueron noticia además la masterclass del chef Campoviejo, el galardón de Casa Nando, de Urbiés, en la primera edición del concurso dedicado al pote, el nuevo libro de Ángel Fdez Ortega con nuevas rutas y senderos por Asturias y la decisión del Ayuntamiento de poner la coletilla "de Turón" a todos los pueblos del valle. ¡Puede que haya algo nuevo !
2017- Enero a Marzo
Eran otros tiempos y el rendimiento industrial del valle imponía un relevante protagonismo de Turón. Las páginas de Comarca repartían a partes iguales los ecos de nuestro pueblo y del resto del Concejo. De aquella también Marcelino Uno con su Turón Patria Querida, publicación visionaria y evento informativo anual, plasmaba para nuestra historia el acontecer sobresaliente de toda una población. Enlazando modestamente con estos precursores y resumiendo el año publicamos las noticias turonesas con presencia en la prensa. Ciertamente habrá muchas más, las llevadas a cabo discretamente por cada asociación. Cuatro entregas destacadas por trimestres, para una lectura más clara, que transcriben el pulso del valle con sus anuncios, proyectos y realidades.
2018 - Enero a Marzo - Reivindicaciones y homenajes
El valle late más allá de sus propios ecos en la prensa, no cabe duda. Sin embargo los años pasan, las reivindicaciones vuelven a la carga y el pueblo vive sus actividades con un rumbo conformista y ritual. Aunque no faltan las ideas inventivas, el margen de maniobra humano-social se ha vuelto escaso. El Centro Social y sus usuarios empiezan 2018 colaborando con la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) y las mujeres afectadas. A pocos metros, detrás de un muro adyacente, desaparece parcialmente la Salle y crece el ambulatorio. En lo alto de la cuenca turonesa, Urbiés lamenta sus deficiencias y reclama reparaciones. Entretanto sigue estancada la gestión turística de nuestro patrimonio minero de la Rebaldana. Llegan finalmente, tardíos, ese merecido tributo a Desiderio Fernández, turonista de tantos proyectos y el homenaje a las mujeres carboneras. Mientras Sonia Zapico se proclama bicampeona incuestionable de la casadiella, la hostelería del valle inaugura las I Xornaes de Frixuelos rellenos. Y vuelve el DNI pero con coletilla.
2018 - Julio a Septiembre - Vuelve la mirada de Pepín Muñiz
Nuestras gimnastas vuelven a ser las protagonistas del tercer trimestre: torneos, triunfos y Premio David Varela 2018. Por otro lado, sigue la interminable saga del traspaso de gestión entre Hunosa y el Consistorio mierense para nuestro emblemático Pozo Santa Bárbara, mientras tanto empieza el deterioro. En cuanto a la limpieza del valle, las promesas siguen sin cumplirse y el hartazgo de los turoneses choca con el rifirrafe administrativo. Y por si fuera poco, la misma administración regional quiso apagar la ilusión de nuestro cuarto Trail nocturno. Cabe sin embargo alguna alegría. Gracias a la gran labor de la Asociación Santa Bárbara se ha recuperado el legado excepcional de Pepín Muñiz el fotógrafo y después de 50 años el Ayuntamiento vuelve a tener un arquitecto… la turonesa Desirée Álvarez.
2018 - Octubre a Diciembre - de Fortuna a Santa Bárbara
Empieza el cuarto trimestre con doble tributo histórico, por un lado el PREMIO POZO FORTUNA para José María Pedreño expresidente de la federación estatal Foro por la Memoria, la Asociación de Familiares y Amigos Fosa Parasimón y el Grupo de Familiares de la Fosa Común de Tiraña. Por otro una misa en honor a los ocho hermanos de La Salle y el padre pasionista fusilados en el cementerio turonés en 1934. Llenan los últimos meses del año las convocatorias habituales: la II Edición de "Caleyando pol Valle de Turón de Pinchos", las XXVIII jornadas gastronómicas, con el Pote como estrella, y los tradicionales festejos de Santa Bárbara, su semana cultural y la ofrenda floral a los mineros. Se habla, por hablar, del parque tecnológico de Figaredo, se evoca el futuro hotel de asociaciones y la utilización del complejo BIC de la Rebaldana, se anuncian las obras para acabar con las inundaciones en Peñule, se informa de la utilidad de las marquesinas solares y del peligro encerrado en las naves de DIASA… Son protagonistas para terminar las últimas semanas de 2018, la escritora turonesa Vanessa Gutiérrez que obtiene, quince años después, un nuevo galardón. "Teodoro Cuesta" y Ricardo González que, 40 años más tarde, desempolva el encierro y el secuestro de Figaredo en mayo de 1978. Finalmente se tiñe de luto el mundo sociopolítico del valle y del municipio con el fallecimiento de Jesús Suárez Álvarez, exedil y promotor de "mejoras del valle".
2019 - Abril a Mayo
Es año electoral y llueven las promesas : parque tecnológico de Figaredo y un largo etcétera. Pero la novedad turonesa en esta campaña es la inclusión en las listas electorales de nuestra conocida vecina y "Mierense del año" en 2016 Piedad Martínez. El desmontaje, piedra por piedra, del convento de Villabazal entra en su fase final, nuestras gimnastas siguen brillando en el mundo de la rítmica y el Ayuntamiento llevando el cine a nuestro valle. Nuevo libro de Susana Pérez Alonso, consultorio recién estrenado y despedida a un grande de la pedagogía, José Espiño. Y mientras la cesión del Pozo de Santa Bárbara se hace esperar, la escombrera de Espinos sigue amenazando las casas y la carretera.
2019 - Enero a Marzo - Desempedrando el convento
Un comienzo de año con noticias redundantes. Poco inédito bajo el cielo turonés. Trabajando como hormigas, los de la Asociación Santa Bárbara siguen recuperando, incansables, nuestro pasado industrial. Vaya aquí, una vez más, nuestro inmenso reconocimiento. El montañismo, con sus prestigiosos invitados, sigue fiel a su cita en el Ateneo y el consultorio está a punto de aparecer. Mientras que en el deporte, nuestras gimnastas siguen acostumbrándonos a sus abundantes cosechas de éxito. Pero ¡ojo !, que la aparente facilidad de sus triunfos no nos haga olvidar las largas horas de práctica para llegar a la cumbre. Necesitados estábamos del dulzor de los frixuelos para pasar el mal trago del “desempedramiento del convento villabacelino”. Y para terminar, una luz novedosa ilumina el trimestre con el descubrimiento de una Estrella…de la danza, brillante turonesa por el mundo.
¿POLITICAMENTE INCORRECTO?
¡No ha habido sorpresas! Por poco que uno estuviera a la escucha de la calle, el triunfo de unos y la debacle de los otros estaban cantados. Es de temer sin embargo que poco cambie para el ciudadano, para nuestro valle de Turón. El haber perdido 10.492 electores desde 1987, muestra una desafección preocupante. Que la euforia o el pesimismo no arrinconen esa reflexión.
Accidentes en el pozo San José 1947 - 1958
El pozo San José tenía fama de haber causado pocos incidentes graves, pero su corto periodo de rendimiento industrial causó 34 accidentes mortales. Antes de su inauguración en 1957 ya llevaba por delante siete vidas. La pequeña Manuela López Zúñiga “Loli”, del n°19 de los Cuarteles, fue la primera víctima colateral de la obra de profundización. Onofre Díaz, recién casado, y Jesús Espiñeira García, joven de 18 años llegado de Galicia, también perecieron en los primeros infortunios laborales. Martín Velasco, Antonio Rodríguez, Jesús Alles, Marcelino Blanco, a cual más joven, perecieron poco antes de la puesta en marcha de la explotación. Luis Joaquín Rey Regueira vio truncada su vida el mismo año de la apertura. Ramón Lamas y Juan Gallego, ambos de 20 años, sucumbieron en los primeros meses de la explotación. Dramas y precariedad para unas familias afligidas y desorientadas. Primera entrega de Marcelino Escudero dedicada al Pozu Nuevu.
Caleyando por Turón
Empezamos la andadura de un nuevo apartado lúdico de nuestra página turonesa. Se trata de ir reconociendo o descubriendo lugares de nuestro valle. Una especie de paseo virtual fotográfico que iremos ampliando por entregas semanales. Con este juego n° 1 vamos calentando el motor de los recuerdos visuales. La respuesta será colgada en la página y compartida también por Facebook.
Caleyando por Turón Juego N° 5 ( y respuestas N° 4)
Caleyando por Turón - Juego N° 4
Los cuatro rincones pintados por Varela fueron acertados por Luis Pruvía (La Veguina, San Justo, La Felguera y San José). En el Juego N° 4 se trata de adivinar el pueblo por una de sus casas…dos bastante “céntricas”, las otras un poco más complicadas. ¡Suerte!
Caleyando por Turón Juego N° 2 ( y respuestas N° 1)
Seguimos caleyando por Turón. Javier González fue el más rápido en encontrar los rincones de la primera entrega. Con este juego n°2 os proponemos cuatro edificios religiosos muy ligados a algunas fiestas de nuestros pueblos. ¿Dónde están? (La respuesta será colgada en la página y compartida también por Facebook).
Caleyando por Turón Juego N° 3 ( y respuestas N° 2)
Luis González fue el primero en dar con las cuatro iglesias o capillas del Juego N° 2. En homenaje a Varela, en esta tercera propuesta lúdica, cuatro rinconces del valle reflejados en su pintura. ¿Dónde están? (La respuesta será colgada en la página y compartida también por Facebook).
Caleyando por Turón Juego N° 6 ( y respuestas N° 5)
Sin acertante para el juego N° 5, compartimos el Caleyando N° 6 dedicado a cuatro monumentos turoneses. Se trata de localizarlos. Misión bastante fácil.
Caleyando por Turón Juego N° 7 ( y respuestas N° 6)
Cada pueblo tenía su fuente y su lavadero. Lugares de higiene y de bullicio, eran también espacios de socialización y transmisores de las noticias del pueblo. Aún subsisten bastantes en nuestro valle, aunque ya solo sirvan, a menudo, de fuente y abrevadero. Se trata pues de adivinar dónde se encuentran estos cuatro.
Caleyando por Turón Juego N° 8 ( y respuestas N° 7)
El asentamiento de los pueblos no siempre aprovechó un relieve propicio. La proximidad de la mina o de los propios pastos llevó al turonés a establecerse en lugares, a primera vista, menos acogedores. Así fueron creciendo y fijando población los caseríos de nuestro valle. Caleyando propone cuatro pueblos a vista de pájaro.
Caleyando por Turón Juego N° 9 ( y respuestas N° 8)
En pleno auge de nuestra minería, la fiebre industrial cubrió nuestro valle de pozos, planos, bocaminas y escombreras. Orgullosos y resistentes testigos del pasado, aún siguen los castilletes de Figaredo, San José o Sta Bárbara, compartiendo presencia industrial con múltiples vestigios mineros esparcidos por nuestro paisaje. Cuatro huellas de nuestro pasado en este Caleyando n° 9.
Caleyando por Turón Juego N° 10 ( y respuestas N° 9)
Decía Samuel Alexander: “La individualidad es un carácter impregnante de las cosas, pero también puede decirse que no hay nada individual que no tenga carácter reconocible mediante el pensamiento universal.” Con estas cuatro casas, compartimos edificios reconocibles por los paseantes de nuestro valle. Elementos de referencia que sirven para identificar el pueblo. Ahí va el Caleyando n° 10.
Caleyando por Turón Juego N° 11 ( y respuestas N° 10)
Hay quien dice que la humanidad se divide en dos bandos antagonistas, los que tienden puentes y los que levantan murallas. Los puentes de nuestro valle han vencido obstáculos conectando pueblos y facilitando en su día el transporte de nuestra industria minera. No todos son grandes obras de arte pero todos han cumplido con su misión. ¿Dónde están?
Caleyando por Turón Juego N° 12 ( y respuestas N° 11)
Nuestros pueblos tienen encanto y mucho, sobre todo si en vez de esa mirada global, satisfecha, demasiado rápida y pasajera vemos con interés esos datos o detalles que tanto dicen de nuestro entorno. Siempre hubo un gusto popular por las inscripciones de fachadas, una tradición que enlaza, dicen los historiadores, con la cultura romana y visigótica. Nuestros monumentos nacionales dan fe de ello. Hoy Caleyando reclama nuestra atención con inscripciones más humildes pero no por ello exentas de importancia. Proclamación de fe o simplemente datación histórica estas son las cuatro propuestas de nuestro juego n° 12 que no serán fáciles de situar.
Caleyando por Turón Juego N° 13 ( y respuestas N° 12)
Nuestro patrimonio industrial certifica lo mejor y lo más trágico de nuestra historia socioeconómica. Proyectos estancados por el momento, nuestros encrestados vestigios mineros esperan tiempos de mayor utilidad. Los últimos días, las noticias alrededor de los futuros proyectos de actividad para el pozo Santa Bárbara abren nuevas expectativas. Hoy Caleyando reclama algo de memoria histórica. Se trata de encontrar nombres y datación adecuada.
Caleyando por Turón Juego N° 15 ( y respuestas N° 14)
Fueron parte de nuestra cotidianidad y cumplieron con su misión: escuela, tiendas, viviendas e incluso capilla provisional. Fueron perceptibles y pasaron a no ser vistos, a dejar de existir. No están en esa papelera de reciclaje virtual de nuestra computadora que permite recuperar los elementos imprudentemente eliminados, han pasado a la historia. Seguramente los puedes ubicar. A ver esa memoria...reciente.
Caleyando por Turón Juego N° 16 ( y respuestas N° 15)
Si caminar a buen ritmo dos veces a la semana es fuente de salud, patear por nuestros pueblos nos mantiene en forma, física y mentalmente. No hay mejor manera para dejarse empapar por la belleza de nuestro valle. Pero muchas veces, por facilidad o necesidad, recorremos las carreteras sin percatarnos de lo que nos rodea. El Caleyando N° 16 lanza el reto desde el mismísimo asfalto
Caleyando por Turón Juego N° 17 ( y respuestas N° 16)
Un río, un valle y un nombre genérico que abarca todo lo que nuestros ojos son capaces de captar a lo largo de sus más de 15km de recorrido. No da abasto la mirada a la hora de fijarse en todas esos conjuntos de casas que forman aldeas, barrios y pueblos a ambos lados del cauce. Sus propias fachadas hablan de su vida interior. Algunas cuidadas con esmero siguen rebotando bullicio y ajetreo, otras ya solo reflejan el abandono paulatino de sus moradores. ¿A ver dónde están estos puñados de vida?
Caleyando por Turón Juego N° 18 ( y respuestas N° 17)
Como la luna presenta siempre la misma cara, la oculta sigue aun revistiendo el mismo misterio. El otro lado de la luna cantaban los Pink Floyd y seguía el misterio musical. De alguna manera también nosotros nos acostumbramos a ver las cosas y nuestro pueblo por la cara más agradable, más conocida. En este Caleyando pasamos a la otra parte. A ver ese conocimiento de la cara menos visible.
Caleyando por Turón Juego N° 19 ( y respuestas N° 18)
Parecen casas de diferentes estilos regionales y sin embargo se ubican en nuestro valle. Unas, abandonadas y exhaustas, resisten malamente al tiempo, otras salieron rescatadas, más por añoranza que por necesidad, recuperando juventud y algo de futuro. Las aldeas, nuestros caseríos, fueron poco más que asentamientos de familias aisladas por nuestros montes. Algunas veces terminaron siendo pueblos. Éstas son algunas de las que cobijaron vida y arroparon proyectos.
Caleyando por Turón Juego N° 20 ( y respuestas N° 19)
Mucho se ha hablado de la España vacía. Entre la denuncia fácil y la recuperación interesada, éste sigue siendo, en demasiados casos, un tema doloroso y sin solución satisfactoria. No es la única, bien es cierto, pero sirva de ejemplo. Un diario nacional resaltaba la noticia de una escuela rural cerrada por falta de niños y reabierta “debido” al…Covid-19. Fue en Aguilar de Alfambra, un diminuto pueblo a unos 50 kilómetros de Teruel. Treinta años después, una pequeñas reformas y resuelto quedó el problema de masificación y de falta de espacio. En Turón las escuelas propagaron enseñanza en muchos pueblos, se vaciaron o desaparecieron. A ver si localizas estas cuatro.
Caleyando por Turón Juego N° 21 ( y respuestas N° 20)
Fueron objeto de culto y consagradas a los dioses además de ser necesarias. Con el paso del tiempo siguieron cumpliendo con su misión y, según los siglos, se convirtieron en verdaderas joyas ornamentales en medio de las plazas. Los manantiales brotaron por todos los pueblos y aldeas de nuestro valle y las fuentes, en solitario o hermanadas a los lavaderos, aprovecharon y encauzaron el liquido vital.
Caleyando por Turón Juego N° 22 ( y respuestas N° 21)
Ser la parte visible de un edificio conlleva desafíos, voluntades arquitectónicas y unos cánones de belleza que reclaman a menudo, aunque no siempre, cierta armonía de las proporciones. Con el paso del tiempo la estética ha tenido que acomodarse con lo funcional y las exigencias del lugar. Pero la modernidad tiene también su encanto. En nuestro valle las construcciones con altura siempre fueron minoritarias por culpa de un subsuelo horadado por las galerías mineras. Estas son algunas de esas fachadas, seguramente más utilitarias que atractivas, que bordean nuestra carretera. A ver si las sitúas.
Caleyando por Turón Juego N° 23 ( y respuestas N° 22)
Los políticos también se preocupan de nuestros hórreos. Hace cinco años el Consejero de Cultura apostaba, dada la limitación presupuestaria, por evaluar la importancia de cada construcción antes de destinar recursos públicos a su mantenimiento. Apuntaba la necesidad de revisar la política de conservación para evitar una «sobreprotección jurídica». Esa era la respuesta a la pregunta formulada por el grupo parlamentario de IU. El mismo partido ha vuelto a insistir, este verano, exigiendo la adopción urgente de medidas de protección para evitar pérdidas irreparables en nuestro patrimonio etnográfico. Hoy tocan pues hórreos en nuestro Caleyando. ¿En qué pueblo están?
Caleyando por Turón Juego N° 24 ( y respuestas N° 23)
Con la nieve todo es diferente, los barrios, los montes y todo nuestro valle comunican tranquilidad, misterio y belleza. Este “Caleyando” rinde homenaje al trabajo de nuestro añorado colaborador, infatigable fotógrafo y amigo José Luis Gómez. Descubramos los lugares bajo el blanco manto.
Caleyando por Turón Juego N° 25 ( y respuestas N° 24)
Algunas moradas fueron mejorando con el tiempo, como los buenos vinos, o por lo menos no perdieron su caché . Otras por el descuido, el abandono, la despoblación o cualquier motivo que se nos antoje para justificar la desolación y el hundimiento, han bajado de categoría, perdiendo ese rango que las hacía presumir. Pero ahí siguen (casi) todas y cada uno de nosotros sabe perfectamente dónde ubicarlas.
Caleyando por Turón Juego N° 26 ( y respuestas N° 25)
Andar por placer, sin un destino determinado, recorriendo nuestros montes y nuestros pueblos es la mejor manera de descubrir los rinconces que caracterizan nuestro patrimonio. En este Caleyando n° 26 mezclamos carretera y caminos poniendo a prueba el álbum mental de nuestras caminatas.
Caleyando por Turón Juego N° 27 ( y respuestas N° 26)
La memoria de los mayores alberga el álbum que contiene cada rincón de nuestro valle. Sus recuerdos se entrechocan cuando se trata de edificios que recuerdan establecimientos, comercios, tiendas o “puestos” con solera o que contaron en el pueblo. Estos cuatro del Caleyando n° 27 siguen en pie, pero, entre abandono y nueva vida, tuvieron días mejores. ¿Dónde están?... Igual recordáis lo que vendían.
Caleyando por Turón Juego N° 28 ( y respuestas N° 27)
Caminar por el valle y contemplar sus casas siempre tiene su parte de sorpresa. A veces nos sobrecogen por su condición, pero casi siempre nos impresionan por su estado, la forma, el estilo y el color de su fachada. La rápida observación de su exterior transmite sensaciones y nutre nuestra imaginación. Hay colores que sorprenden, otros cuestionan la armonía del entorno y unos cuantos desconciertan. Y aunque la elección de la pintura no siempre responde a un criterio meditado, el blanco aporta una sensación de luz y resalta, como ningún otro tono, los detalles exteriores, tejados, puertas, ventanas, galerías y corredores. Puede que esta luminosidad añadida a la construcción algo tenga que ver con nuestro pasado minero y los días grises que a menudo abovedan el valle. A ver dónde lucen estas fachadas.
Caleyando por Turón Juego N° 29 ( y respuestas N° 28)
No se trata de competir con el águila o el halcón que tienen una agudeza visual cuatro veces superior a la nuestra, ni tampoco rivalizar con esos envidiados drones que seguramente realzarían la belleza de nuestro valle, valgan aquí estas cuatro vistas para asomar estos pueblos de sobra conocidos. Un Caleyando a distancia para descubrir los nombres.
Caleyando por Turón Juego N° 30 ( y respuestas N° 29)
Casas con doble vida, por fuera y por dentro. Dice un estudio que se puede mejorar la vida a través de nuestra casa. Es obvio que las casas son una fuente de energía, esa que desprendemos e impregna cada uno de sus rincones. Vistas por fuera, con buen aspecto, habitadas por dentro, éstas son las cuatro que invita a descubrir el Caleyando de esta semana.
Caleyando por Turón Juego N° 31 ( y respuestas N° 30)
A veces es un caserío aislado como en Cotarente, tres o cuatro en El Escobar, pocas más en Faucosa y más de lo mismo en Fresneo. Así se quedaron o fueron creciendo los pueblos de Turón a partir de un puñado de casas. Hoy, aunque en algunos impere la soledad, en muchos siguen latiendo vidas, las ausentes y las de ahora siguen contando en la historia de nuestro Valle. ¿Y éstos pueblos dónde están?
Caleyando por Turón Juego N° 32 ( y respuestas N° 31)
Los Romanos con sus 400 vías y más de 85.000 kilómetros, comunicando la cuna del impero con sus lejanas provincias,justificaron y patentaron el famoso refrán: “Todos los caminos llevan a Roma". Nuestros indicadores, de manera más modesta, muestran esos conocidos senderos y caminos que siempre conducen a algunos de esos entrañables pueblos que albergaron y protegieron nuestra infancia. ¿Dónde se encuentran estos indicadores?
Caleyando por Turón Juego N° 33 ( y respuestas N° 32)
Los pozos fueron muchas veces la alternativa, aunque no siempre lo lograron, para acabar con la explotación de la minería de montaña. En nuestro valle fueron los últimos en cerrar. En su espacio de producción, además de los castilletes, que aún siguen perfilando nuestro horizonte recordando nuestro pasado industrial, también se ubicaban su necesaria casa de máquinas, la casa de baños, la lampistería, el botiquín y demás edificios según el tamaño y la necesidad del complejo minero. Hoy con este "Caleyando" toca descubrir estas cuatro edificaciones bien conocidas por los turoneses.
Caleyando por Turón Juego N° 34 ( y respuestas N° 33)
El corredor de madera, como los hórreos, es un elemento arquitectónico típico de nuestro paisaje asturiano. En los pueblos de nuestro valle, su disposición y su diseño armonizan y alegran las fachadas de muchas viviendas. Este Caleyando n°34 propone cuatro fotos y…ocho nombres. A ver dónde está cada uno.
Caleyando por Turón Juego N° 35 ( y respuestas N° 34)
Hubo tiempos en los que el acceso a nuestros pueblos era toda una expedición. El tiempo largo, el camino complicado y las cuestas exigentes. Hoy la más pequeña de las aldeas presume con su carretera. Con este Caleyando, mediando el asfalto, nos aproximamos a cuatro de nuestros rincones. ¿A ver dónde están?
Caleyando por Turón n° 36 (y respuestas al n° 35)
“Nunca digas de esta agua no beberé”. Un refrán de sobra conocido que viene a decir que por mucho que nos repugne algo, no podemos afirmar que no lo haremos o que estemos libres de que nos suceda. Pero en la realidad de nuestras caminatas por nuestro valle y nuestros montes seguramente todos hemos bebido algún día del agua que abunda en nuestros parajes. A ver dónde sitúas éstos del Caleyando n° 36.
Candanal, balcón abierto al valle
La tranquilidad, la privilegiada situación solariega y su doble mirada hacia el valle merecen más de una visita. Candanal, que en su día llegó a contar con más de sesenta habitantes, va rehabilitando poco a poco parte de su patrimonio, con sus típicos corredores de madera y sus trabajadas paredes de piedra. Un álbum para seguir esa lenta pero muy visible recuperación.
Canga abajo, Canga arriba… la escuela de Repedroso
Las fotos individuales son como rincones de intimidad, la lectura siempre póstuma de momentos de vida. Son el reflejo de un instante que desaparece al ritmo del clic para empezar una nueva existencia hecha de sobresaltos y de olvido hasta un resurgir postrero de recuerdos embellecidos y truncados. Pero a quién pertenece el relato de una foto colectiva. Muchas caras, algunos nombres y remembranzas que rebasan los bordes demasiado herméticos del documento. Cuarenta alumnos y cuarenta pinceladas multiplicadas por otros tantos toques de padres, familia o amigos. La clase de doña María Luisa reclamaba pues una voz coral. Con Amor, David y Jorge revive una de las tantas, y seguramente subjetivas, facetas de la escuela de Repedroso.
Cantando por el mundo
Con esta primera entrega damos comienzo al seguimiento musical de nuestro barítono turonés más internacional. Aunque el papel de barítono es menos conocido que el de tenor, su trabajo es "más introspectivo". Este año Luis Llaneza cumple 30 años de carrera musical. Un periplo musical que compagina brillantes recitales y numerosas “master class” que imparte a alumnos de canto y “cualquier otra persona que utilice la voz en su trabajo”, como él dice. Tiene un empeño especial en llevar el mensaje y la fuerza de la música clásica a todo tipo de público, independientemente de sus conocimientos y estudios musicales. Viaje musical …viento en popa y a toda vela.
Cerrando El Cristo
Con esta segunda entrega de nuestro colaborador Daniel González completamos el reportaje fotográfico del Cristo’22. Son unas instantáneas para recordar nuestra actividad social alrededor de la convocatoria festiva. Estas magníficas imágenes grabadas en la mente servirán de puente de espera para la cita de septiembre 2023. Largas semanas que servirán para suscitar, no nos cabe la menor duda, nuevas ideas y avivar el impulso encomiable de nuestra Sociedad Turonesa de Festejos. Que no falte el ánimo.
CESVAT y las elecciones 2015
Nuevas elecciones y un panorama de Turón desolador: desindustrialización, pérdida de prácticamente todos los puestos de trabajo, retroceso demográfico y decadencia social y cultural. Después de haber invitado todas las formaciones a exponer sus propuestas, CESVAT (Centro de Estudios sobre el Valle de Turón) propone un texto de reflexión, previo a nuestro ejercicio democrático.
Clementina, guardiana del Archivo de Hunosa
No podía ser de otra manera…una turonesa convertida en guardiana de unos archivos que son toda una Historia, la vida de unas minas que dieron vida a las vidas de sus mineros. Allí en los archivos de Hunosa,desde el 2010, por tierras langreanas, oficia Clementina Álvarez Díaz tal una sacerdotisa de la antigüedad guardiana de los secretos más negros y misteriosos de una tentacular red industrial que un día cubrió gran parte de Asturias y abrazó hasta el agotamiento todo el valle de Turón. Desde su Linares natal, oteando el valle con los chispeantes ojos de su infancia, el color verdinegro piropeaba con los ojos cercados de carbón de familiares y amigos. Esa es Clementina la nieta de Rosa y Liano, vehiculando gratos recuerdos escolares en “el autocar de Gelito”, orgullosa de su paso por el Instituto de Turón y protagonista y espectadora a la vez de momentos complicados de la vida cultural y laboral de nuestro valle. Sacar provecho de lo positivo y minimizar lo negativo es el gran fundamento de su filosofía cotidiana. Sus estudios de geografía e historia de la Universidad de Oviedo la han llevado “vuelta a casa, a lo suyo”, al conocimiento de nuestro (su) pasado para poder entender mejor nuestro presente y futuro. Hoy, Clementina, con sus raíces y parte de su presente aún en el valle, es parte de nuestro Turón en ese centro de la gran Memoria minera, la que preserva lo que fuimos, en la que llegas a identificarte con infinidad de “sentimientos, sufrimiento, felicidad y modos de vida”. Allí están Hulleras de Turón y su propio valle, sellados como nunca y para siempre en su trágica y gratificante Historia. “Algo tendrá este valle que no deja indiferente a nadie, un valle para sentir, aprender y disfrutar”.
Comiendo con un amigo
Daniel Pérez: de Armiello a San Francisco
De Lago a Fresneo
A mediados del siglo pasado ya habían terminado las maniobras y el ajetreo carbonero del Grupo. La maleza y el olvido siguen devorando sus últimos vestigios, las oficinas, la bocamina y el plano, por el 4° San Pedro. Antiguamente, cruzar la vía y el río desde las cuadras de Lago era adentrarse en esta histórica explotación minera de montaña entre "San Benino y San Vítor". Hoy el camino, uno de los más bonitos de nuestros montes, nos conduce hasta Fresneo por San Pedro, Enverniego, Ablaneo y Cotarente. Belleza y soledad para un paisaje y unos caseríos antaño populosos, destacados y activos.
De pueblo en pueblo
Por muy pequeño que sea, cada pueblo, cada puñado de casas lleva por dentro toda una historia. Es el relato silencioso de asentamientos en busca de espacio para existir. Cuántas idas y venidas laborales, cuántas caminatas para buscar sustento y educación. Estos son algunos de los lugares de un valle que cobijaron a nuestras familias mineras. A ver si los identificas.
Del Atlántico al Báltico
Dibujar distancias cuando se trata de los periplos musicales de Luis Llaneza es proyectar líneas saltarinas multicolores y sobrepuestas dando treinta veces la vuelta a nuestro planeta. Tan pronto en un continente como en otro, tejiendo una red de recitales y amistades por capitales exóticas, míticas, entrañables y de ensueño. Un final de 2018 saltando el charco, con escala obligada en el valle, deleitando con su talento bajo un decorado cuyo telón se extiende de las evocadoras misiones paraguayas a la improbable sidrería moscovita. Pasaporte turonés y ciudadano del mundo.
Drones en el cielo turonés
Los drones vuelan sobre Figaredo. No, no, no es el emblema del ex–futuro parque tecnológico sino el mero control de los avances de la evacuación de los estériles mineros. Pero esos extraños y populares pájaros de la tecnología podrían controlar el estado de Rozamayor, enclave de Turón por extensión festiva, desdeñado durante el año y adecentado el tiempo de los Felechos. También lograrían captar la degradación y el descuido de nuestros pueblos, las peligrosas casas abandonadas y la maleza amazónica de nuestro río cuya obstrucción presagia grandes problemas de inundación en caso de fuertes lluvias. O finalmente descubrir esas bocaminas rescatadas por la Asociación Santa Barbara… un tercer trimestre 2017 de ciencia ficción.
El Caburnu
Del Puente del Caburnu apenas quedan las macizas bases que aguantaron el paso del sacrificado carbón. Unos pasos más allá, el estrecho camino que protege, silencioso y frondoso, nuestro andar hasta el pueblo. Y a la última vuelta del sendero, el encuentro del jóven Pablo y la primera casa aletargada. Las piedras luchan y resisten. Algunas con más suerte han recuperado su alma.
El Colléu y La Caleya, dos barrios para Carcarosa
El Colléu y La Caleya, dos barrios para un pueblo con solera. Con su doble conexión con Mieres y el centro turonés, Carcarosa ha logrado retener parte de su población, cuando la mayor parte de los pueblos de montaña se han vaciado irremediablemente. Sus tradicionales casas con corredores, sus hórreos, su lavadero, su capilla de Santa Ana y su privilegiado emplazamiento, oteando la parte alta del valle, certifican su encanto.
El Cuélebre está en Turón
José Guerra confiesa tener un gusto pronunciado por los dragones. Este turonés emprendedor y optimista, con la dosis necesaria de realismo que permite luchar y avanzar por la vida, ha escogido el Cuélebre, esa criatura legendaria de las mitologías del norte, para que cumpla, seguramente, con una de sus funciones: vigilar y guardar los tesoros, en este caso su acogedora tienda de informática. Un negocio que regenta con sociabilidad y cuyos clientes son o se convierten rápidamente en amigos. Mi amigo Nel Amaro, huésped asiduo y exigente de la página ideada por José fue el primero en hablarme de él. “Esti chaval está apostando por Turón, tien mucho mérito. Tienes que hablar con él, me decía”. Con sus treinta y ocho años, su juventud por delante, su mujer y su hijo decidió instalarse hace once años en un valle del que siempre oyó hablar, omnipresente en la vida familiar, y en el que estaba cada dos por tres a pesar de haber pasado sus años más jóvenes en Mieres. Sus raíces familiares son turonesas como lo son sus recuerdos y hoy su fuerza “apostando por trabajar, vivir y disfrutar en el valle”, como dice. Cuando llegó con su proyecto informático, sabía perfectamente que el valle ya no era el de antaño, el que tantos comentan, el que muchos añoran. Pero él siempre tuvo el convencimiento de que con voluntad, lucha y una mezcla equilibrada de optimismo y de realismo podría hacerse un hueco en el oscuro panorama socio-económico que parece haberse apropiado del pueblo. “No soy el único, dice convencido, ha venido gente de fuera con ilusión y nuevos proyectos y están dando una buena lección de perseverancia y de convencimiento”. “Han venido con una mirada diferente, añade, no han llegado en busca del Turón del pasado, referencia de tantos, sino que han venido convencidos por la potencialidad del valle”. Ese es el valle que defiende José Guerra, animando a los turoneses a unirse, a salir de su zona de comodidad, a soñar con grandes proyectos y a luchar para conseguirlos.
El metro de Doha empieza en Turón
Segundo trimestre de 2017. Repiten protagonismo el conjunto minero de Santa Bárbara, el ambulatorio y el devenir socioeconómico de nuestro economato. El Ateneo acoge a Nuria Varela y a Lito en la presentación de sus libros y la exposición del colectivo de pintores del Caudal bajo el título "Arca". Pero también son actualidad, en la parte negativa, la creciente inseguridad en el valle y en la positiva la brillante actuación de nuestras gimnastas en el Campeonato de España celebrado en Guadalajara, la exitosa marcha del 50 aniversario de Hunosa y la adquisición por Zitrón de una nave cerrada de La Cuadriella para ampliar su producción de elementos para la ventilación del metro de Doha.
El secreto de la nieve
Alguien dijo, y quizás todos lo pensemos, que la Navidad no es una época, sino un estado mental. Que nuestras mentes se pueblen pues de buenas sensaciones y que estos momentos familiares tan esperados sean un derroche de los mejores sentimientos. El rumbo de la vida tiene bastantes escollos, algunos los sorteamos y en otros tropezamos muy a pesar nuestro. Os deseamos una dosis generosa de cada cosa provechosa que pueda colmar vuestros deseos y seguir complaciendo o aliviando vuestro viaje. Sirvan estos paisajes de nuestro añorado colaborador José Luis Gómez para desearos desde el pueblín un 2020 más dulce.
Enamorado de Turón, hasta la médula
Turón y Tomillo, Tomillo y Turon, T&T...una marca patentada. Mi padre ha sido un ejemplo a seguir aquí en este pueblo. Durante cuarenta años fue el hacedor de las Fiestas del Cristo. Todo el mundo lo recuerda con nostalgia aquella época en que obraba en el valle. No la nostalgia puramente afectiva más bien el recuerdo de un hombre comprometido con su pueblo hasta la médula.
Encuesta: Situación Valle de Turón I
Primer proyecto de CESVAT (Centro de Estudios Sobre el Valle de Turón), aquí está, seis meses después,la primera entrega resumida de una encuesta necesaria que arroja datos interesantes de una interesante radiografía sociólogica del Valle. Seguirá una segunda parte y la versión integral de este trabajo de investigación.
Encuesta: Situación Valle de Turón II
Segunda parte de la encuesta realizada por CESVAT (Centro de Estudios Sobre el Valle de Turón). Con un 45% colaborando en el movimiento asociativo del valle, los turoneses valoran muy mal la situación del Valle, sus administradores y los politicos. Reclaman inversion para generar empleo y fijar la población y piensan que junto con el optimismo son necesarias más unión, lucha y participación.
Entrevista a Manolito BAQUERO.
Con el lanzamiento de esta primera entrevista empezamos el ensamblaje de un rompecabezas gigante constituido por los recuerdos individuales de los turoneses, notables o anónimos, que formarán, con el tiempo, una especie de memoria colectiva de nuestro valle, finalidad primera de esta página. Mensualmente elvalledeturon.net dará la palabra para que esos testimonios no se pierdan, para que todos los testigos que han vivido en su propia carne páginas de la historia de este pueblo puedan compartirlas y dar fe de unas vivencias que merecen todo nuestro reconocimiento. Manolito Baquero es, sin duda alguna, uno de esos testigos privilegiados del pasado, del presente y del devenir de nuestro valle
Falo, un hombre con suerte.
Ganador del II Premio Eurostars Hotel de la Reconquista
Después de un brillante accésit en la convocatoria de 2018, nuestro colaborador y fotógrafo turonés José Vicente Secades se alza con el primer puesto del II Premio Eurostars Hotel de la Reconquista. ¡Enhorabuena!
Hunosa culpable
Hace ya unas cuantas décadas que Desiderio Fernández, Desfer, ha dejado el Valle para asentar sus inquietudes en Caleao, bonita tierra del agua. Pero a nuestro agitador de ideas, nadie le puede negar su larga actividad en favor de Turón, sus proyectos y sus logros. Hoy, gran conocedor de las promesas incumplidas, sigue denunciando la injusta situación de nuestros pueblos.
José Muñiz, fotógrafo: testigo de una época
Una visita obligada a esta magnífica exposición. Una muestra que ofrece una selección de imágenes desde finales de los años 40 hasta mediados de la década de 1950, momento en el que José Muñiz recogió la época dorada del valle del río Turón. En ella se recogen tanto retratos como paisajes, oficios, festejos, estampas cotidianas o de minería, un testimonio esencial para conocer la Asturias del siglo XX.
L'Artusu - Resistiendo al olvido y a la maleza
Un silencio que quebrantan los habituales ladridos perdidos por el monte, una maleza que ha podido con los hórreos y unas casas desiertas, que aún salvan las escasas visitas, así se nos descubre un caserío que lleva por nombre la aspereza de su paisaje: l’Artusu. Un nuevo álbum para alegar y asentar su existencia en la historia del valle.
La FORMULA I en el barrio San Francisco
Empieza el trimestre con la publicación de "Memoria" editado por Javier F. Granda, en el que Rosa Mary Lombardía, una niña de once años de La Rebaldana, con sus palabras de “gran narradora, capaz de tenerte con los ojos abiertos durante horas evoca el sacrificio del minero y su mujer”. Un libro para recordar con humildad y detalle nuestra vida minera. Y el Coro Minero compartiendo emoción en el prestigioso certamen coral de Ejea de Los Caballeros en Zaragoza y nuestras gimnastas cosechando galardones en todos los torneos y en Nacional de Guadalajara. Mientras tanto, el centro social de personas mayores celebra su XXII aniversario y nuestros hosteleros añaden al pote y a los frixuelos las primeras Xornaes de la cazuelina. El ambulatorio avanza a pasos agigantados a la vez que empiezan los primeros desperfectos en el Pozo Santa Bárbara y que un grupo de irresponsables celebran carreras desenfrenadas por el Barrio San Francisco.
La Faucosa
Un apiñonado puñado de casas que la distancia interpretaba como engullido por la maleza y el olvido. Así fue como La Faucosa fantaseó por mi mente hasta encontrar su camino y a su mejor valedor, y último habitante, hasta 1974, Silvino García González, hijo de Jesús el jurado de la Hueria. ¡Un pueblo huérfano de sus nueve familias!
La herencia minera del valle de Turón
En 2005 Marcelino Escudero García, vinculado desde los 18 años a la vida minera de nuestro valle, publicaba el resultado de su larga, apasionada y minuciosa investigación : “La herencia minera del valle de Turón”. No se trata de un legado plagado de estadísticas que acreditarían con creces la descomunal producción del carbón en nuestras explotaciones mineras sino más bien del relato detallado de historias trágicas, casi siempre infravaloradas, de esos hombres que perdieron sus vidas arañando el mineral en las entrañas de nuestro subsuelo. Es un libro homenaje convertido desde su publicación en un imprescindible manual de consulta. Pocos son los turoneses y exploradores de nuestra historia que no tengan a mano esta detallista y al mismo tiempo conmovedora publicación. Hace tiempo que nuestra página perseguía el dar nueva forma a este compendio minero. Hoy, con el visto bueno de su esposa Luisa Friera Cabo, a la que va nuestro más sentido agradecimiento, el escrito de Marcelino recobra esa esperada nueva vida. No nos cabe la menor duda, no podía faltar esta referencia en nuestra página turonesa.
La mujer de Guerrero
Con pudor y curiosidad, Aída, 3º Premio David Varela 2014, se adentra en el álbum de recuerdos de su abuela convertida, orgullosa y nostálgica, en la mujer de Guerrero. Amor, rivalidades intrafamiliares y un entorno que nunca más será el mismo: el barrio de Podrizos, Vera’l Camín, San Andrés… y la fuente de todos los amores, Espinos.
Les fiestes de mi pueblu
Momento importante para una mujer comprometida con su pueblo. Con el pregón de este año Piedad Martínez Díaz nos hizo viajar por su Turón, un pueblo que conoce, respira y vive. Una actividad personal infatigable en muchas asociaciones turonesas reconocida con varios galardones, entre ellos Mierense del año, y desde 1990 en la dirección del colectivo Amas de Casa. Pero el pregón, para los que asistimos, fue más allá del texto que publicamos, con sus anécdotas, sus evocaciones e inspiraciones del momento… Piedad en sintonía con los suyos.
Los garajes de La Cuadriella
Obra del arquitecto M.A. García-Pola Vallejo los siete garajes de La Cuadriella contruidos en 2004 y recompensados con un accesit del Premio Asturias ya forman parte del paisaje arquitectónico moderno asturiano. Las "cocheras" innovadoras turonesas han entrado de lleno en las revistas de arte especializadas.
Miguel el del Mesón
Miguel Legarreta Muín, Miguel el del Mesón… toda una personalidad de la hostelería turonesa. La gente habla unánimamente bien de él, cosa rara en cualquier pueblo donde la proximidad tantas veces nos hace ser más críticos, ver con exagerada clarividencia los defectos de los demás. Su tono es sosegado, claro, caluroso y te hace sentir bien desde el primer contacto. Se le nota mesurado y evitando en todo momento el entrar en conflictos y en antagonismos. Acoge a los clientes como si fueran de su familia, conoce sus nombres y anticipa sus gustos. Detrás de la barra ejerce con tacto una autoridad moral a la hora de imponer respeto en algunas conversaciones acaloradas. El negocio lo lleva como una pasión, como la misión de su carrera. Porque le gusta lo que hace, porque siente y ejerce un profundo respeto por los demás, porque ha aprendido a oír, ver y callar, Miguel es hoy un testigo ineludible de la historia reciente de nuestro valle. De no haber recalado definitivamente en Turón, seguramente hubiera seguido varando, como dice, por un mundo del que chapurrea, admite humildemente, varias lenguas. Se nos antoja que para este turonista, con el corazón (com)partido entre sus montañas navarras y los cordales turoneses, el mesón, su Mesón ha sido la mejor atalaya para la observación de la vida de nuestro pueblo. Llegó con el último cotillón del valle pero cuando aún había sitio para emprender negocio. Hoy a punto de poner un cierre irreprochable a su trayectoria profesional echa una mirada objetiva a nuestra historia y se dispone a seguir fiel a su mayor compromiso humanista, el que tiene con sus seres queridos, con sus amigos y con sus dos pueblos. Gracias Miguel por haber venido a Turón.
Mis recuerdos 2
Alguien dijo que « recordar es desandar, y lo que antes se vivió, volverlo a contemplar ». Con esta nueva entrega de « Mis recuerdos… » seguimos recorriendo ese camino necesario por lugares y momentos familiares turoneses. Iris, Margarita, Olga, Pilar, Sonia y Luis nos devuelven algunos de los que ya se fueron y seguimos añorando. Los demás siguen turoneando felices.
Mis recuerdos...
En ese diáologo emocional que desempolva nuestras emociones, al contemplar las fotos familiares, se amontonan nuestros inalterados recuerdos. Unas instantáneas en blanco y negro que exigen una mirada esencial…la del corazón. Quedan pobres las palabras al expresar lo sentido, pero ahí están para rescatar lo perdido y correr discretamente el velo de nuestro panteón personal.
Nati y Ramón
Con sus ochenta años Nati Velasco sigue paseando esa clase y elegancia que siempre la han caracterizado. Es además una persona “a la escucha” y sensible que no vive de recuerdos, aunque los tiene muy presentes y mentalmente bien organizados, porque piensa que el presente siempre es el momento de disfrutar de las cosas buenas que les da la vida. Junto con Ramón Fernández, de Puente Villandio, administrativo de la Empresa que supo conquistar, lleva toda la vida en Espinos. Este dúo de testigos privilegiados y lúcidos se sabe la historia de esta parte alta del valle y de su minería. No viven en una casa cualquiera. La casa-cuadra que fue unos de los edificios distintivos del grupo minero ha sido la atalaya desde la que físicamente han podido contemplar gran parte del valle, San Andrés hacia arriba y el serpentear del paisaje turonés echando la mirada hacia la derecha. Comenzaron su andar juntos disfrutando de una vida familiar cómoda, junto a los padres, en esta construcción impresionante, último testigo, junto con la de Podrizos, de aquellas famosas casas-cuadras que suministraban las sufridas mulas a la explotación del carbón en nuestra zona. Han seguido viviendo en el piso superior, con el envidiable y magnífico suelo de pino rojo de siempre, y no han querido borrar del todo esa página de historia que representa la construcción. Gracias a ese amor por ese pasado tan ligado a la vida de su padre, José Velasco el cuadreru, aún conservan en la parte baja, lo que fuera antiguamente la cuadra, tolvas para el pienso, pesebres, aperos y hasta nombres de esos animales tan sacrificados. El espacio de unos momentos, Nati y Ramón, con su gran memoria, han devuelto el frenético trajín de toda una actividad laboral, el punto de llegada de tantos grupos, aquellos planos inclinados, la trinchera de La Faya… Se cierran los álbumes y se silencian los recuerdos. Ramón, con sus 85 años, reemprende la siega y Nati sus quehaceres, su lectura o su navegación por internet. Disfrutan, son felices y no se arrepienten de no haber abandonado este rincón que es toda su vida.
Navidad : ¡dulce Navidad!
¿Añoranza? ¿Nostalgia? ¿Recuerdos, buenos y malos? ¿Paraíso perdido de la infancia? …¡Quién sabe! Con su “Dulce Navidad”, Carlos Vega rescata y desempolva las múltiples facetas de unas fiestas que cada familia ajusta a la medida de sus sueños y de sus posibilidades. Unos resquicios mentales en los que encajan nuestras propias remembranzas.
Nubes de tormenta
Una pieza más de ese mosaico histórico que sigue poblando la memoria de nuestros mayores. Son los recuerdos de una abuela que con seis años, arrinconada su inocencia, grabó con dolor momentos de penuria y de injusticia. Un relato con el que Óscar García Nuñez obtuvo el 2º Premio David Varela 2014.
Nueva etapa para SO.TU.FE.
A menos de tres meses de las fiestas grandes turonesas, oyó la llamada acuciante y desesperada de SOTUFE y respondió presente para tomar la antorcha de una asociación de festejos que dice “forma parte del patrimonio y de la tradición del pueblo”. Ante una situación que hubiera podido acabar en la desaparición de la asociación sumiendo aún más el valle en la desidia, José Luis Coble entendió que había que dar un paso y junto con un grupo de colaboradores decidió tomar las riendas con ilusión. Sabe que lo inmediato es trabajar con rapidez para sacar las próximas fiestas adelante pero también llega a la directiva con nuevas ideas de cara al futuro. Está muy agradecido a sus predecesores en este cargo, quiere “aprender de lo que hicieron y consiguieron los demás y emprender una nueva etapa intentando dar un nuevo impulso para que este (re)encuentro festivo de todos los turoneses entre en una nueva dinámica”. Turonés nacido en La Rebaldana, con ascendencia andaluza, José Luis, afable, relajado, simpático y que inspira confianza, no es un novel en la toma de responsabilidades asociativas. Durante más de diez años fue presidente del Club Atletismo Mieres y colabora diariamente con Radio «Parpayuela». Este prejubilado administrativo de Hunosa tendrá que aligerar su agenda para dedicarse a las actividades de Sotufe que van más allá de las fiestas del Cristo, aunque afirma que “en este periodo de crisis no hay que olvidar lo festivo, los tres días de alegría…un oasis que permita olvidar lo complicado de la situación”. La nueva directiva que preside adelanta que entre sus objetivos está el contar con gente joven en la asociación para “modernizar” las diferentes actividades y el utilizar las redes sociales para captar nuevos socios o colaboradores, con el gran objetivo de lograr que parte de “los miles turoneses que se han visto obligados a dejar el valle vuelvan a estrechar los lazos con el territorio y den su apoyo a la organización”. El reto es grande y los recursos escasos, pero Coble no está solo, “todos los colectivos se han puesto a nuestra disposición porque el movimiento asociativo de Turón es un ejemplo de compromiso inquebrantable con el valle”. Vaya aquí nuestro apoyo desde esta página.
Ocho años más tarde
Dicen los expertos de marketing que un proyecto es un esfuerzo temporal que se lleva a cabo para crear un producto, servicio o resultado único y que la naturaleza temporal de los proyectos indica un principio y un final definidos. De ningún modo se puede aplicar la definición a este proyecto turonés que echó a andar aquel 14 de septiembre de 2010. Hoy, ocho años más tarde, una media de 30.000 visitas mensuales y un total acumulado de 2.502.291 certifican nuestra misión y agradecen nuestra tenacidad y la generosa aportación de nuestros colaboradores. John Quincy Adams dijo que “La paciencia y perseverancia tienen un efecto mágico ante el que las dificultades desaparecen y los obstáculos se desvanecen”…y nosotros seguimos con Turón.
Pozo San José, un jubilado con 36 años
No podía haber explotación más céntrica para nuestro valle. El pozo San José emerge oficialmente un 25 de septiembre de 1957 e inmoviliza definitivamente sus jaulas cinco días después de Reyes en 1993. Regalo amargo para cerrar nuestra historia minera, la rica y agitada vida industrial de nuestro valle. Hoy su silueta metálica de rojo vestida, sumida en una desatención intolerable, sobrevive como punto de encuentro simbólico, una referencia para nuestro relato histórico, su evolución y su presente. Porque ahí están acurrucando el erguido y abandonado castillete, un transformado Barrio San Francisco, FUCOMI, un centro de mayores, un colegio de La Salle , mitad consultorio y mitad futuro complejo residencial tutelado y la otrora escombrera revegetada. “Tenía fama de haber causado pocos accidentes mortales” decía Marcelino Escudero en su publicación, pero también es verdad que en “un periodo de explotación tan corto perdieron la vida a causa de su funcionamiento 34 personas”. Con la evocación de la historia del pozo entramos en la segunda entrega del libro de Escudero.
Pregon 2021, el IPC: iniciativa, participación, constancia.
Ceferino, el sacerdote, el turonista “multifunciones”. Un cuarto de siglo dedicado a su parroquia de Santa Bárbara y a sus amigos feligreses en los que tantas buenas huellas y vivencias ha dejado. Miembro activo de algunas de las más importantes asociaciones del valle, Ceferino, turonés militante, tiene la memoria al lado del corazón. Memoria envidiable para recordar los hitos de la historia del valle y corazón harto agradecido con todos los protagonistas de nuestras páginas más memorables. Es pues éste un pregón que susurra a cada turonés y que deja el sabor agradable de los mejores recuerdos. Un IPC que tiene valor de vida.
Pregón Fiestes del Cristo 2014
Por Eduardo Solís Tamargo "Parana" (Facultativo especialista en Cirugía Ortopédica y Traumatología)...."Cuando llega el día mágico del 14 de septiembre somos capaces de sentir Turón desde la distancia..."
Turón, centro de mi mundo.
Si para SOTUFE, la elección del pregonero siempre es una decisión delicada y difícil, para el elegido la designación es un gran honor y sobre todo una enorme responsabilidad. José Luis Tirador, el eterno ausente como él mismo se presentó ante los turoneses, el trotamundos afincado definitivamente en su querida Asturias, ha sido el encargado de afrontar este complicado ejercicio.
Un compromiso que abre puertas.
De entrada Alfredo Velasco González, Fredo para sus numerosos amigos y conocidos, se nos antoja un hombre normal y corriente. A medida que se nutre nuestro diálogo, sus palabras sencillas cuestionan nuestra propia vida y brotan con la fuerza de la convicción. Se confirma nuestra primera impresión: el premio Mierense del año 2011 es un hombre normal y corriente, eso que todos queremos ser, respetuoso, tolerante con los demás, y sobre todo solidario y comprometido. Es un hombre que desde su juventud ha dado sentido a su vida y así, huyendo de la cómoda pasividad ha ido caminando por la existencia haciendo algo muy sencillo: ayudar a los demás a recuperar el norte de sus propias vidas. Escuchando con pudor acomplejado, a este turonés, nacido en Espinos en 1959, nos vienen a la memoria unos versos machadianos de sobra conocidos que queremos parafrasear para ajustar al perfil de una persona que junto con su familia, Balbina su esposa y sus hijos Raúl y Berto, ha decidido ofrecer lo mejor que lleva dentro, sus valores humanistas : “Mi infancia son recuerdos de un barrio de Turón… mi juventud, muchos años en tierra solidaria… mi historia, muchos casos que recordar quiero … y amé cuanto ellos puedan tener de solidario … y, más que un hombre al uso que sabe su doctrina, soy, en el buen sentido de la palabra, bueno”. En esa línea del tiempo que lleva a Fredo desde Espinos hasta los talleres de Villabona, un largo recorrido en el que están sus años felices por la parte alta del valle, en un ambiente minero en el que “había más cercanía y por consiguiente más unión, más colaboración, en el que nos apoyábamos unos a otros”, un marco infantil solamente ensombrecido por el recuerdo ocasional de los accidentes del carbón y de aquel duelo que, a su paso, enmudecía caminos y vecindario y recluía a los más pequeños en sus casas. Una entrañable conversación, más que una entrevista, que relata de manera somera, los momentos de inflexión de todos sus compromisos. Fredo se ha reinventado, descubierto y encontrado en cada una de esas decisiones. Hoy después de oír rechinar en nuestra mente las puertas de Villabona, sentémonos un momento y meditemos unos instantes sobre nuestras vidas, lo hecho y lo por hacer, saludando con admiración las largas horas, no siempre fáciles, de dedicación y de entrega de un generoso altruista movido por su creencia…una persona buena.
Un corazón de madera
Un homenaje más a un hijo del valle, José Luis Varela. Un profesional que ha dejado una huella muy grande en la Laboral trabajando con sus manos y convenciendo, a través de sus proyectos, con ese material noble que es la madera.
Un ecohuerto para el valle
Quizás pueda parecer natural que esta iniciativa del ECOHUERTO como proyecto respetuoso del medio ambiente pueda encontrar su ubicación idónea en un valle como el nuestro dentro de ese "Paisaje Protegido de las Cuencas Mineras" y de cierto sí lo es. Pero lo que parece menos evidente, dada la situación socio-económica, es el que unos jóvenes emprendedores vitorianos tengan la voluntad y el convencimiento de que ese proyecto, generoso y atento a nuestra naturaleza pueda ir adelante así en un lugar un poco apartado de la gran actividad. Es verdad que en nuestro valle, el todopoderoso imperio del carbón ocultó o eclipsó durante demasiados años la riqueza de nuestro bosque y de nuestro suelo, haciendo que algunos olvidaran esa enorme riqueza ecoforestal de sus castaños, robles, hayas y demás abedules con los que convivimos desde siempre. Pues bien, una vez más emprendedores foráneos apuestan por nuestra biodiversidad. Ángel García Beitia y su compañera, Andrea Arana Marcos, llegaron hace unos años a nuestro municipio para dedicarse a la agricultura ecológica. Con la creación de este espacio natural quieren participar de la formación y sensibilización a este tema con la elaboración y oferta de proyectos dirigidos a los centros escolares y demás personas interesadas y preocupadas por el medio ambiente y la agricultura ecológica. Siembras, recuperación y conocimiento de semillas autóctonas, reciclaje y compostaje, recolección de frutos silvestres e itinerarios verdes, rutas de aventura y sendas temáticas y un abanico amplio de actividades esperan a los enamorados de nuestra naturaleza.
Una fuerza tranquila al servicio de los demás
Si la vida fueran números fríos, los de Julio Cora serían dramáticamente significativos de la dureza de su recorrido. Nace el 10 de mayo del 22 y con 11 años y seis hermanos se queda sin madre. Siete años más tarde, el 3 de abril de 1940, un accidente minero trunca la vida del padre. Así empieza la vida adulta de Julio Cora Gutiérrez, minero hijo de minero y testigo veterano de la historia de su pueblo Repedroso. Pero Julio, con sus noventa años, hombre cauto a la hora de hablar, ha sublimado su vida, recorriéndola a su ritmo de hombre bueno, como una fuerza tranquila al servicio de los demás. Con Nedina su esposa son la memoria viva, casi secular, de su pueblo. A medida que hablamos, su mirada serena y profunda se frunce y rebusca lentamente y selecciona con pudor unos recuerdos que terminan alumbrando nuestra conversación. No es un dialogo fluido, su memoria comunica perfectamente con sus silencios y sus palabras son suficientes e imponen respeto y admiración. Es un pudor que no contradice la nitidez de lo que comparte, se le notan los labios muy cerca del corazón. De Vivero a Turón, de sus bisabuelos gallegos a su nieta, Julio, evidencia su memoria de lugares y personas, familiares o gente cruzada durante una vida “normal y corriente”, como dice. Confiesa tener “fotos a mansalva” pero carecer de paciencia para ordenar ese pasado que su nieta quisera ver plasmado de manera más sistemática en unos álbumes que aún siguen sin estrenar. Son unas cajas repletas de varios cientos de fotos que contienen cada una toda una parcela importante de su propia historia porque como comenta “en aquellos tiempos las fotos eran caras y solamente se hacían en acontecimientos muy especiales”. No tiraron nada, aquí están los archivos de una historia familiar ramificada por Galicia, Argentina, Suiza, Francia… y como centro vital para él, Repedroso. A Nedina y a Julio se les nota felices, comparten recuerdos, coinciden en ellos, se completan. Son 174 años de recuerdos acumulados con los que son capaces de reescribir su propia historia con todo detalle. Julio y Nedina, Nedina y Julio, inseparables, faenando por la huerta entre kiwis, calabacines, cebollines, “arbejos” … y animales domésticos, o sentados en un banco al sol delante de su casa, verdadero promontorio contemplando el valle y el transcurrir de su vida. “Mientras haya salud, te espabilas, si te cansas vas más despacio, aunque estemos caducando, yo no me doy de baja”. Eso es optimismo.
Urbiés y sus rincones
Urbiés cierra o abre el valle de Turón, según como se mire y según como se llegue. Lo cierto es que es pueblo y zona al mismo tiempo, parroquia, centro social y punto de encuentro o de convergencia de sus alrededores. No en vano se habla de la zona de Urbiés, esa ladera en la que se insertan como queriendo apiñarse, para protegerse mejor, los pueblos y las aldeas que le rodean. Una historia conjunta para un Turón a la altura, con unos rinconces que narran su vida.
Urbiés, cerrando el Valle
La herradura orográfica del valle tiene su cabecera en el cordal de Urbiés. Desde allí, con sus treinta pueblos y aldeas, la parroquia abre y cierra el valle. Una situación a cuya verde espalda palpitan otros cuatros concejos mineros. Allá en lo alto de la Colladiella, como coronando la propia crónica del valle, el monumento a la paz y a la memoria recuerda sus luchas y los renegridos mineros de la cresta rememoran un pasado industrial perenne en nuestra historia.
Victor Guerra García
Autor del estudio "Masonería y revolución del 34" dedicado a las cuencas mineras y en particular a Turón.
Vuelven los artistas
La digitalización de nuestra vida cotidiana, con su fácil y casi compulsivo clic-clac nunca remplazará la mirada del artista. Porque cuando el ojo del fotógrafo neutraliza el ángulo y la luz, la mente echa a andar y el leve pulsar del botón inmoviliza la magia del momento. En estas instantáneas, con Asturias como principal fuente de inspiración, moran nuestras propias emociones.