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Ruta por el Cordal de Urbiés y Pico Polio
Del Alto de la Mozqueta, ida y vuelta, Ángel Ortega propone un recorrido de cuatro horas, por el cordal de Urbiés, al alcance de cualquier caminante. Y así, entre guiño y guiño a los concejos de Langreo y de Mieres, podremos contemplar un entorno natural que nunca nos cansamos de admirar.
RUTA POR EL CORDAL DE URBIÉS Y PICO POLIO
Por el cosmos de Las Cuencas
El cordal de Urbíés se despliega a lo largo de unos 6 Km en sentido este – oeste en un rosario de modestas montañas que van desde el Tres Concejos hasta el pico Polio. Toda esta alineación geográfica, denominada Cordal de Urbiés, configura la divisoria natural de Langreo y Mieres y con comunicación directa
entre ambos municipios, unidos por la carretera local LA-7 a su paso por el Alto de la Mozqueta, en cuyas vertientes se sitúan el valle del Samuño y del Turón.
Esta sierra es la protagonista del histórico discurrir por sus laderas de un milenario camino romano que desde San Justo de Turón enlazaba con el Carbayu de Langreo. Esta vía fue profusamente transitada por los peregrinos que se dirigían o procedían de San Salvador de Oviedo. Las ermitas de San Justo y de la Virgen del Carbayu eran y son los hitos de esta conocida variante del camino de Santiago como lo demuestra la existencia del hospital de peregrinos de San Justo, cuyo edificio aún se mantiene en pié. Los picos Cogollu y Polio coronan el paisaje y la historia de este rincón, Estas rutas corresponden a los itinerarios P.R. AS-44 “Vuelta a Langreo”, P.R. AS-34 “Cordal de Urbiés” y “La ruta del Tendeyón”.
El itinerario aquí propuesto, arranca desde el Alto de La Mozqueta (848 m.) yéndonos directamente hacia el oeste, hollando la pista de tierra señalizada, que nos conduce sin apenas altibajos. Discurre todo él por la lomera del cordal, asomándose alternativamente hacia ambos valles, que enseñan insospechados paisajes y panorámicas que abarcan el macizo de Ubiña, la cordillera Cantábrica y serranías que se van desgranando en altitud y cuyas máximas cotas afloran muchas de las ocasiones de un impresionante marde nubes. Atravesamos la Campa Urbiés y la Campa Barrera donde se reparten sendas señalizadas hacia Urbiés y al Tendeyón respectivamente. Después seguimos avanzando sin cambiar el rumbo hasta la Campa Les Abeyes, (840m.) -2,2 Km. en 40 min.-, hermosa plataforma que nos ofrece bellas asomadas hacia el valle de Turón. Aquí la pista inicia un marcado descenso en dirección a la aldea de San Justo. Mientras que otra se eleva a nuestra derecha con destino a la braña La Cerecina. Seguimos la traza de ésta última que al poco abandonamos para retomar el sendero señalizado, que se eleva hasta coronar la cota superior de la Campa Cervaliza, perfecta atalaya hacia los relieves del valle del Samuño.
Esta sierra es la protagonista del histórico discurrir por sus laderas de un milenario camino romano que desde San Justo de Turón enlazaba con el Carbayu de Langreo. Esta vía fue profusamente transitada por los peregrinos que se dirigían o procedían de San Salvador de Oviedo. Las ermitas de San Justo y de la Virgen del Carbayu eran y son los hitos de esta conocida variante del camino de Santiago como lo demuestra la existencia del hospital de peregrinos de San Justo, cuyo edificio aún se mantiene en pié. Los picos Cogollu y Polio coronan el paisaje y la historia de este rincón, Estas rutas corresponden a los itinerarios P.R. AS-44 “Vuelta a Langreo”, P.R. AS-34 “Cordal de Urbiés” y “La ruta del Tendeyón”.
El itinerario aquí propuesto, arranca desde el Alto de La Mozqueta (848 m.) yéndonos directamente hacia el oeste, hollando la pista de tierra señalizada, que nos conduce sin apenas altibajos. Discurre todo él por la lomera del cordal, asomándose alternativamente hacia ambos valles, que enseñan insospechados paisajes y panorámicas que abarcan el macizo de Ubiña, la cordillera Cantábrica y serranías que se van desgranando en altitud y cuyas máximas cotas afloran muchas de las ocasiones de un impresionante marde nubes. Atravesamos la Campa Urbiés y la Campa Barrera donde se reparten sendas señalizadas hacia Urbiés y al Tendeyón respectivamente. Después seguimos avanzando sin cambiar el rumbo hasta la Campa Les Abeyes, (840m.) -2,2 Km. en 40 min.-, hermosa plataforma que nos ofrece bellas asomadas hacia el valle de Turón. Aquí la pista inicia un marcado descenso en dirección a la aldea de San Justo. Mientras que otra se eleva a nuestra derecha con destino a la braña La Cerecina. Seguimos la traza de ésta última que al poco abandonamos para retomar el sendero señalizado, que se eleva hasta coronar la cota superior de la Campa Cervaliza, perfecta atalaya hacia los relieves del valle del Samuño.
La ruta a seguir da un busco giro a la izquierda donde el sendero rotura la ladera oriental del Cogollu hasta coronar su cima (1017 m.) -4 Km. en 1 h. y 15 min.-considerada el “techo” de Langreo.
Permaneceremos un lago tiempo en su cima, identificando en torno a la misma el vasto horizonte de la región. Mirando al oeste contemplamos el contiguo pico Polio que se eleva hacia las nubes desde la herbosa plataforma de La Cerecina. Hacia allí nos dirigimos orientados por la traza del sendero que desciende hasta el siguiente crucero, lugar donde el P. R. AS-44 “Vuelta a Langreo” continúa con su destino hacia El Cabu y el Alto Santumillano. Eludimos esa dirección y proseguimos directamente a La
Cerecina. (909 m.),- 4,3 Km. en 1 h. y 50 min.- majada que reparte un buen número de prados y cuadras que se prolongan por la ladera sur del cordal. Varias pistas ganaderas confluyen en este paisaje mágicolugar y nosotros hemos de proseguir hacia poniente embarcados en esta pista que fue de origen minero. Cuando inicia una remontada, es el momento de abandonarla, apoderándonos de un marcado sendero a la izquierda de la marcha a cuyo término nos emplazamos en la misma cima del pico Polio. (1.051 m.) -5,7 Km. en 2 H. y 30 min.-Un buzón montañero, vértice geodésico y varias antenas de comunicación coronan esta cumbre, una de las más visitadas por los montañeros asturianos, sin duda gracias a situación estratégica del centro de la región y cuyas vistas alcanzan más allá de los Picos de Europa.
El retorno al Alto de La Mozqueta se hace más cómodo retomando las pistas de aproximación, eludiendo de esta manera las cimeras del cordal.
Permaneceremos un lago tiempo en su cima, identificando en torno a la misma el vasto horizonte de la región. Mirando al oeste contemplamos el contiguo pico Polio que se eleva hacia las nubes desde la herbosa plataforma de La Cerecina. Hacia allí nos dirigimos orientados por la traza del sendero que desciende hasta el siguiente crucero, lugar donde el P. R. AS-44 “Vuelta a Langreo” continúa con su destino hacia El Cabu y el Alto Santumillano. Eludimos esa dirección y proseguimos directamente a La
Cerecina. (909 m.),- 4,3 Km. en 1 h. y 50 min.- majada que reparte un buen número de prados y cuadras que se prolongan por la ladera sur del cordal. Varias pistas ganaderas confluyen en este paisaje mágicolugar y nosotros hemos de proseguir hacia poniente embarcados en esta pista que fue de origen minero. Cuando inicia una remontada, es el momento de abandonarla, apoderándonos de un marcado sendero a la izquierda de la marcha a cuyo término nos emplazamos en la misma cima del pico Polio. (1.051 m.) -5,7 Km. en 2 H. y 30 min.-Un buzón montañero, vértice geodésico y varias antenas de comunicación coronan esta cumbre, una de las más visitadas por los montañeros asturianos, sin duda gracias a situación estratégica del centro de la región y cuyas vistas alcanzan más allá de los Picos de Europa.
El retorno al Alto de La Mozqueta se hace más cómodo retomando las pistas de aproximación, eludiendo de esta manera las cimeras del cordal.
Ángel F. Ortega. Turón, enero de 2012
