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Desde la Reconquista

Durante la Reconquista, los reyes astures crearon en su entorno una estirpe de nobles que por los servicios prestados, bien en las guerras o por otros favores cortesanos, eran premiados con tierras pasando a ser propietarios de las mismas. Así aparecen por el valle las grandes familias todopoderosas, sin olvidar el poder que ostentaba el clero.

IV-LA VIDA TRADICIONAL EN LA ÉPOCA MEDIEVAL

 

IMG_3589.JPGDurante la Reconquista, los reyes astures crearon en su entorno una estirpe de nobles que por los servicios prestados, bien en las guerras o por otros favores cortesanos, eran premiados con tierras pasando a ser propietarios de las mismas. Así aparecen por el valle las grandes familias todopoderosas, sin olvidar el poder que ostentaba el clero.
Eran dueñas absolutas del territorio y del pueblo servil como los Rodrigo García, Sueros, etc. A estos les sucedieron los Martínez de la Vega y Manuel de la Vega. Entre los siglos XII y XIII el valle fue aumentando su población y por lo tanto las particiones del terreno entre los herederos. De esta manera nacen las villas, organización del territorio heredado de la cultura romana. Se fundaron de esta guisa los feudos de Villabazal, Villapendi y Villandio.
 

La forma de “villa” evolucionó desde la simple explotación agrícola hasta la formación de aldeas. Se crean los pueblos de Linares, Carcarosa, etc., con caracteres más complejos. Las vegas y laderas próximas a las anteriores se caracterizarán por la formación de otros núcleos que están estructurados por la casa, hórreo, molín y la huerta. Así nacen las caserías como unidad de explotación familiar de la tierra. Las condiciones de vida en aquellos tiempos eran muy sacrificadas. Sin apenas tiempo para el descanso, las tareas campesinas tenían sus peculiaridades en cada estación del año. En el verano se llevaban a cabo la recolección de la hierba y Carcarosa horreo.JPGlos frutos del campo que se almacenaban para los crudos inviernos. El ganado era otra importante fuente de ingresos. Las familias con menos recursos debían de recurrir a la “comuna” o alquiler del ganado a los terratenientes para los trabajos agrícolas, a cambio deberían de entregar parte de sus beneficios. Entorno a esta actividad única y necesaria para mantener la familia, gravitaban otros impuestos que iban dirigidos al clero y al Real Erario.


En el siglo XV el valle alcanza un estamento social más configurado con familias ligadas directamente a las diferentes aldeas que se formaron. A partir de ese siglo y dentro de los muchos avatares históricos por los que pasa el valle, entran en danza otros grupos de familias portentosas que siguen acaparando el poder político y económico. Los Bernaldo de Quirós fue la primera de la nueva estirpe. Sus descendientes fundaron en el año 1646 La Casa de Figaredo en el palacio que aún se mantiene en la misma localidad. La casa de Cortina se fundó en el año 1650 por D. Diego García de Bernaldo de Quirós. Aún se conserva la casa palacio ligada desde aquellos tiempos a la contigua ermita de San Clemente. La Casa de Villarejo fue Palacio de Villarejo-1.JPGfundada por D. Alfonso de Heredia en 1587 construyendo en aquel tiempo un palacio que aún se mantiene en la localidad de Villarejo de Santullano. Todas estas familias y algunas más asentadas fuera del valle tenían grandes posesiones a todo lo largo del mismo.
 

En siglos posteriores la población del valle se acomoda a la vida campesina manteniendo la casería como único elemento productivo de subsistencia hasta la llegada de la industrialización. Viene la guerra contra los franceses y la desamortización con los consiguientes cambios estructurales de la vida política y económica.
 

 

LAS FIESTAS Y ROMERÍAS

Las manifestaciones sociales de aquella población por aquellos tiempos tenían lugar en sus fiestas patronales, la matanza, el amagüestu, la andecha y el filandrón amén de las deportivas como el juego de los bolos, etc. el calendario festivo del año comenzaba con la romería de San Blas en el mes de febrero. Esta ermita ubicada en Villandio fue restaurada recientemente. Se tienen noticias de su existencia a finales del siglo XVIII. La Soledad de Enverniego fue y sigue siendo otra de las festividades de gran arraigo en Turón. Tiene lugar el lunes de Pascua entorno a su ermita ahora restaurada, teniendo conocimiento de su existencia ya en el siglo XVII. En el mes de julio se celebra desde tiempos inmemorables la fiesta patronal de Santiago Apóstol en Figaredo. Entorno a su iglesia situada a la entrada del valle y próxima al Palacio de Bernaldo de Quirós tiene lugar la efeméride. La iglesia parroquial que está bajo la advocación de Sta. María está muy reformada en la actualidad, teniendo entorno a su arquitectura exterior un hermoso cabildo orientado al poniente. Antiguamente y según consta en documentos del año 1625 se denominaba Sta. María de Piñulí debido, según se cree, a su antigua ubicación en el pueblo de Peñule. La actual localización viene dada posiblemente por los lazos que ligaban al clero con los notables de la época, siendo determinante el cambio ante la construcción del palacio llevada a cabo a mediados del siglo XVII.
 LA SOLEDAD - GRUPO-1.jpg

Agosto era considerado el mes de las romerías. Ya desde aquel entonces y hasta nuestros días se conmemora la fiesta patronal de San Roque y La Magdalena en la localidad de Villabazal. Se llevaba a cabo entorno a su ermita ahora desaparecida. Se sabe de su existencia ya desde el año 1681 por una serie de datos perfectamente conocidos en los que se destaca un testamento otorgado en esa fecha por un vecino del lugar. En el barrio de La Masuria de Villabazal se conserva una epigrafía que data del año 1790, suponiendo que la ermita estaba ubicada en la plazoleta del Nozalón. San Justo y Pastor es otra de las romerías que tienen lugar en agosto. Se celebra el día 6 en el lugar del mismo nombre y al pie de su renombrada capilla cuya historia ya ha sido descrita en anteriores capítulos. En la localidad de Carcarosa, soleado pueblo asentado en las estribaciones del Monte Polio celebra su patrona Santa Ana, a mediados del mes de agosto. Su ermita está también bajo la advocación de San Antonio Abad. Recientemente restaurada (1996), se conoce ya desde 1807. 

Las fiestas patronales de todo el valle se celebran el 14 de septiembre. Están bajo la advocación del Santo Cristo de la Paz, cuya imagen actual, tallada en el año 1850, se conserva en la diminuta capilla sita en el barrio de La Crucina. Fue construida en el siglo XVI y desde aquellas fechas ha sido un santuario muy venerado. En el transcurso de los años la capilla superó muchas transformaciones. Ya en el año 1858 y con motivo de una ampliación de la misma, fue visitada por la reina Isabel II con motivo de un viaje a Asturias. En la actualidad está nuevamente restaurada y sigue albergando la devoción de los fieles.
 

San Martín es la parroquia más importante del valle. Su efeméride con menos tradición que el Cristo tiene lugar el 11 de noviembre en su iglesia localizada en el barrio de La Felguera. Las primeras noticias que se tienen de la misma datan del año 857 por medio de un documento otorgado por el rey Ordoño I. Se sospecha que la antigüedad está más allá del propio documento. A lo largo de los siglos ha sufrido muchas transformaciones arquitectónicas, sobremanera en el siglo XVII con la construcción de un amplio cabildo. En 1944 otra reforma cambió radicalmente su fisonomía exterior llegando así hasta nuestros días.


EL CARMEN PROGRAMA-1.jpgEl 7 de octubre se celebran las fiestas patronales de Urbiés que están bajo la advocación de Nuestra Señora del Rosario cofradía creada en el año 1657. Las romerías se sucedían por todo el valle alcanzando los pueblos altos como Santa Olaya y La Güeria de Urbiés. La ermita de Santa Olaya, que aún se conserva, fue construida antes del año 1645. La Ermita de los Remedios de La Güeria fue levantada por los vecinos en el año 1850. En el barrio de San Andrés se tienen noticias de la ubicación de una ermita dedicada a San Isidro, ocupando el mismo lugar que la actual.
 

En las excavaciones efectuadas para la construcción de la moderna iglesia, que fue inaugurada el 24 de diciembre de 1965, se hallaron restos de materiales, una pila bautismal y sepulturas medievales. La actual iglesia parroquial está bajo al advocación de Nuestra Señora del Carmen, celebrando su efeméride en el mes de agosto. Muy cerca del lugar se localiza el barrio de Repedroso donde existe una epigrafía grabada en la denominada "Casa de Valeria", cuya fecha data del año 1681.

 

Valle de Turón: paisaje humanizado de las cuencas, capítulo IV, Ángel Fdez Ortega